Espero que haya encontrado un grupo de creyentes en Cristo en donde pueda crecer en su fe, animar a los demás y servir en el reino de Dios. De eso se trata la iglesia.


Otra parte de estar en la iglesia, también llamada la familia de Dios, es la idea de la mayordomía. Dios ha creado todo y, por lo tanto, todas las cosas le pertenecen. Sin embargo, Dios ha puesto a disposición este mundo y todos sus tesoros para nuestro uso. Eso significa que somos mayordomos, o administradores, de los bienes de Dios.


En la ley del Antiguo Testamento, Dios pidió que su pueblo diera una porción (el 10%) de sus productos o ingreso a la casa de Dios (Deuteronomio 14:22). Esto era un acto de acción de gracias por todas las bendiciones de Dios, así como un reconocimiento de que todo lo que tenemos es un regalo de Dios. Todo lo que tenemos le pertenece a Él y Él nos los confía con la expectativa de que lo honremos con nuestros recursos.


Como cristianos, reconocemos que ya no vivimos para nosotros mismos, sino para Dios. La Biblia dice que todo lo que hacemos debe glorificar a Dios. Por lo tanto, l;a forma en la que usamos nuestro tiempo, nuestros talentos, nuestro dinero, e incluso nuestros cuerpos, deberán dar gloria al nombre de Dios. Dar lo que tenemos para la expansión del reino de Dios representa un privilegio, y es también una forma de adoración. 

La Biblia dice: "Sin embargo, no debemos verlo como una obligación y hacerlo a regañadientes, sino como algo que hacemos por gratitud y fe con un corazón alegre" (2 Corintios 9:7)


Pídale hoy a Dios que le muestre cómo desea Él que usted dé su talento, tiempo y dinero.