Lección 29: La verdadera riqueza (parte 2)
Lee Santiago 5:1-6 - https://www.bible.com/bible/103/JAS.5.NBLA
La preocupación de Dios no es la riqueza real, sino nuestra actitud hacia la riqueza. Proverbios 13:11 dice: «Las riquezas adquiridas apresuradamente menguarán, pero quien las acumule poco a poco las aumentará». Creemos en el trabajo duro. Y para el cristiano, nuestro lema debería ser: Trabaja duro y confía en Dios. Dios ordenó el trabajo para que pudiéramos proveer a nuestras necesidades. Así que, trabaja duro. Pero no seas un adicto al trabajo. Mantén el trabajo en equilibrio. El trabajo es una herramienta, no una meta.
Leemos en 1 Timoteo 6:9-10 «Pero los que quieren enriquecerse caen en tentación, en lazo, en muchos deseos insensatos y perniciosos que hunden a la gente en la ruina y la destrucción. Porque el amor al dinero es raíz de toda clase de males. Es por este afán que algunos se han alejado de la fe y se han traspasado a sí mismos con muchos dolores.» Pablo nos advierte de los muchos problemas que conlleva el deseo de ser rico. Nos dice que tengamos cuidado; ¡es una trampa! Fijémonos en lo que Pablo dice y no dice aquí.
Veamos primero lo que no dice. No dice que el dinero es malo. No dice que el dinero es una raíz del mal. Más bien, dice que el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. El consejo de Dios no es contra los ricos, sino contra las prioridades equivocadas de los ricos. En 1 Timoteo 6:17 leemos: «En cuanto a los ricos de este tiempo, mándales que no sean altivos, ni pongan sus esperanzas en la incertidumbre de las riquezas, sino en Dios, que nos provee abundantemente de todo para que disfrutemos».
Dios se toma muy en serio cómo consigues tu dinero. No llenes tus bolsillos engañando a la gente con lo que les debes. No seas deshonesto con la gente. No los estafes. Cuando debas algo a alguien, paga lo que se te debe.
Empleados: tratad también con justicia a vuestros jefes. Trabaja honradamente y paga honradamente. Si vendes coches usados, hazlo con honradez. Si te pagan por horas, no pierdas el tiempo. Cómo consigues tu dinero - importa. Proverbios dice: «En todo trabajo hay ganancia: pero la palabrería de los labios solo tiende a la pobreza.» Proverbios 14:23
La forma en que gastamos nuestro dinero también es muy importante. Santiago dice a sus lectores que están gastando mal su dinero: Santiago 5:5. No debemos malgastar nuestras riquezas. No debemos ser demasiado indulgentes con nosotros mismos. Cuanto más dinero se gana, más fácil es malgastarlo. Tendemos a decir: «Me lo merezco. Yo lo valgo, mejor me divierto». Solo porque puedas pagarte algo - no significa que debas comprarlo. La Biblia nos dice que no malgastemos nuestro dinero.
*Un hombre muy rico escribió Proverbios 11:4 - ¿cuál es su consejo sobre la riqueza? _____