Lección 28: La verdadera riqueza (parte 1)
Lee Santiago 5:1-6 - https://www.bible.com/bible/103/JAS.5.NBLA
Es parte de la naturaleza humana sentir que la persona que tiene más (riqueza, talento, apariencia, poder) es mejor que la persona que tiene menos. Sentimos que son más bendecidos por Dios, o que deben ser imitados. Por lo tanto, también es de naturaleza humana que la persona con este tipo de riquezas se aproveche del que tiene menos, normalmente simplemente porque puede hacerlo. Desgraciadamente, esto es tan cierto para los cristianos como para los incrédulos, y Santiago nos recuerda a todos, al principio de este capítulo, que nuestras acciones tienen consecuencias.
Las lecciones a aprender:
1. Las riquezas no proporcionan la felicidad final.
2. Las riquezas no sustituyen a las cosas espirituales de la vida.
3. Las riquezas no son duraderas. Incluso nuestras mejores ropas se deterioran. Nuestro oro y plata terrenales se corroerán y un día desaparecerán y carecerán de sentido. La apariencia y los talentos se desvanecen, y el poder pronto es usurpado por otros. Por supuesto, cuando muramos, lo dejaremos todo atrás.
Este óxido es la prueba de la impermanencia y la falta de valor de todas las cosas del mundo. También es una advertencia: Santiago nos advierte de que nuestro «deseo» de tales riquezas acabará por corroer nuestro cuerpo y nuestra alma. Santiago utiliza imágenes vívidas para poner de manifiesto este punto cuando dice: «Vuestro oro y vuestra plata se han corroído, y su corrosión será una prueba contra vosotros, y devorará vuestra carne como el fuego. Habéis guardado un tesoro para los últimos días». (Santiago 5:3)
¿Por qué es que tantos que ganan riqueza de repente la pierden casi tan rápidamente? Porque valoran más sus riquezas que su relación con Jesucristo. Cuando el joven rico vino a Jesús, Jesús le dijo que solo necesitaba hacer una cosa para heredar el reino y tener un tesoro en el cielo, 'da todas tus posesiones a los pobres y sígueme'. Aquel joven rico dio media vuelta y se alejó triste (Mateo 19:22).
*¿Qué dice Deuteronomio 24:14-15 sobrevalorar el dinero más que a los demás? _____
Santiago 5:5-6 - Dios te bendecirá en la medida en que des. Escucha lo que dice en Proverbios 11:24-25 «Uno da gratuitamente, y se enriquece; otro retiene lo que debe dar, y solo sufre carencias. El que trae bendición será enriquecido, y el que riega será él mismo regado». Jesús dijo en Mateo 6:19-21 «No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen y donde los ladrones entran por la fuerza y roban; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen y donde los ladrones no entran por la fuerza ni roban. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón». Jesús no dijo que donde esté nuestro corazón pondríamos nuestro tesoro. Dijo lo contrario. Donde ponemos nuestro tesoro es donde estará nuestro corazón.