Lección 2: Superando los problemas


Lee Santiago 1:2-12 - https://www.bible.com/bible/103/JAS.2.NBLA


¿Alguna vez has escuchado el dicho, “¡Cuando la vida te da limones, haz limonada!”? Esta frase, en realidad, tiene un principio bíblico. Muchos en la Biblia convirtieron la derrota en victoria, la prueba en triunfo. En lugar de ser víctimas, fueron vencedores.


Todos hemos pasado por la vida y hemos tenido raspones, moretones y golpes, y nos han dejado sin aliento. Incluso como adultos, nos herimos por nuestros cónyuges, accidentes que nos dejan incapacitados, o la muerte repentina de alguien cercano. A veces perdemos el empleo y eso duele. Nos lastiman las palabras cortantes que nos dejan sangrando por dentro.


¿Qué dijeron estos hombres sobre la adversidad? 


*Job– Job 14:1 _____ 


*David – Salmo 34:19 _____ 


*Pablo – 2 Corintios 4:8-9 _____


En la lección pasada vimos que Santiago estaba dirigiéndose a los cristianos judíos que estaban literalmente golpeados por la adversidad. Estaban siendo perseguidos bajo la persecución traída por el emperador Claudio. Los estaban expulsando de sus hogares y su tierra natal. Constantemente eran tratados con hostilidad por los gentiles que los odiaban por ser judíos y por los judíos que los odiaban por ser cristianos. Estos creyentes estaban golpeados y maltratados por problemas que no desaparecían. Santiago, en su carta, se pone a trabajar para sanar actitudes rotas y torcidas, y para vendar espíritus golpeados con la verdad del Gran Médico sobre los problemas.


¿Qué pensamos sobre los problemas? 


-Algunos creen que son una forma de castigo de parte de Dios. 


-Otros prometen que si alcanzas un cierto nivel de espiritualidad, todos tus problemas desaparecerán. 


-Algunos dicen que no existen, que son solo producto de tu imaginación (hablando en voz alta para hacerlos realidad).


Santiago dice – Santiago 1:2 – "Consideradlo todo gozo, hermanos míos, cuando os halléis en diversas pruebas;" no dijo “si”, dijo “cuando” – 1 Pedro 4:12. Tienen un propósito – Santiago 1:3-4 – "porque ya sabéis que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Y que la paciencia tenga su fruto completo, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte nada."


Tenemos que dejar de ver los problemas como molestias y empezar a verlos como pruebas. Pruebas diseñadas específicamente por Dios para estirar nuestra fe, no solo nuestros bolsillos, amistades y salud. En lugar de verlos como nuestros enemigos, debemos verlos como si fueran siervos que traen las circunstancias que nos ayudan a crecer. Más sobre esto en la próxima lección.