Lea Génesis 25:12-27:40 - https://www.bible.com/es/bible/127/GEN.25.NTV


La controversia y las peleas entre hermanos son frecuentes en la mayoría de las familias y forman parte del crecimiento. Sin embargo, pueden contenerse si se tratan con coherencia y justicia. Pero cuando los padres muestran parcialidad y toman partido, esta lucha a menudo se vuelve maligna y fatal para la unidad familiar.


Este estudio se abre con la alegría de un nacimiento largamente esperado. Después de veinte años, Isaac y Rebeca no sólo tienen un hijo, sino gemelos. A medida que los niños crecen, la parcialidad de los padres se desarrolla con consecuencias trágicas para las relaciones familiares. Sin embargo, a lo largo de estos acontecimientos, Dios lleva a cabo su propósito soberano y sigue siendo misericordioso con esta familia a pesar de sus fracasos. No sólo podemos aprender de sus errores, sino que también podemos sentirnos alentados por el amor que Dios nos tiene incluso cuando fracasamos.


En el capítulo 25, versículos 29-34, leemos lo diferentes que eran estos hermanos. A Esaú le encantaban las actividades al aire libre, trabajar con animales; alguien a quien hoy podríamos llamar ganadero o agricultor. Jacob, sin embargo, era una persona de interior, probablemente alguien que hoy sería un ejecutivo o un hombre de negocios. Uno era el favorito de su padre, y el otro el favorito de su madre. Como la riqueza (el número de animales que tenía) y la fama (sus habilidades para la caza) parecen haber sido más importantes para Esaú que las cosas espirituales de la vida (la bendición del primogénito), vendió su primogenitura a su hermano por una sola comida.


*¿Qué en tu vida podría decir que estás más preocupado por las cosas de esta vida en vez de la vida espiritual?


En la lección 12 - Génesis capítulos 20-21 - estudiamos los efectos de un error que cometió Abraham cuando no confió en Dios con respecto a su esposa Sara mientras visitaba otro país. Ahora, en el capítulo 26, encontramos a Isaac cometiendo el mismo error con su esposa (Rebeca) y otro rey extranjero.


*¿Qué actitud crees que hizo que padre e hijo cometieran el mismo error?


El capítulo 27 nos muestra el resultado del favoritismo de los padres con sus hijos. Vuelve a leer el final del capítulo 25, donde la promesa de Dios a Rebeca, antes de que nacieran los gemelos, decía que el menor, Jacob, sería el gobernante sobre el mayor, Esaú. Vea también en el versículo 30 que otro nombre para Esaú es Edom, y si lee la historia del nacimiento de Jesús en Lucas, encontrará que el rey de entonces, Herodes, era edomita - el odio entre los descendientes de Jacob y Esaú duró más de dos mil años.

 

*Como resultado de este estudio, ¿qué puedes hacer en tu propia familia o en tu situación actual para reducir las tensiones y mejorar las relaciones?